BIB AZAHAR 14

QUISIERA

Quisiera ser del mar la eterna amante,
vivir como sirena entre sus olas,
preñada entre corales de amapolas
llegar hasta el orgasmo relajante.

Quisiera ver el mar a cada instante
y en su seno, a un sin fin de caracolas,
pececillos cubiertos de vitolas
o sentirme gaviota vigilante.

Como la luna que en el cielo brilla,
también yo soy del mar su prisionera
soñando sus caricias en la orilla.

¡Por estar en sus aguas bien le diera
de mi barca el velamen y la quilla,
haciendo de su espuma, mi bandera!

***

LIBERACIÓN

A trocha va por la vida
buscando nuevos senderos
y surca mares austeros
que profundizan su herida.

Veredas y vericuetos
divisa en el horizonte
y niebla espesa en un monte
de lucubrantes bocetos.

Todo resulta obsoleto
y su prisma desusado,
mas le mantiene atrapado
en un vegetar discreto.

Al fin se agita indignado
ante su perfil incierto
y prende mecha en el yerto
de su existir trasnochado.

Busca amor desesperado,
mezcla luz en su paleta
y revolviendo la arqueta
de los recuerdos pasados,
dice adiós a aquel planeta
del que al fin, se ha librado.

***


ARRUGAS DE LA VIDA

Las arrugas del alma
la soledad las produce
y la falta de entusiasmo
a la tristeza conduce.

Y las arrugas del cuerpo
son del tiempo galardones
por el paso de los años,
las vivencias y emociones.

También existen arrugas
del hambre y la sed ahijadas,
en estómagos de niños
y en sus vidas mal tratadas.

Hasta el astro poderoso,
en infinito horizonte,
arruga su luz solar
ocultándose en el monte.

Arrugas hace la mar
con su suave movimiento
y la arena de la playa
con la caricia del viento.

La voz también tiene arrugas
cuando queriendo gritar
produce sólo un gemido
que nadie puede escuchar.

Y para colmo de arrugas,
las que produce la ausencia
y el buscar, sin conseguir,
el calor de otra presencia.

Al final, todas coinciden
en la persona acabada,
cuando al terminar su lucha
le espera sólo la Nada.
***
Marisa Ferrer

BIB AZAHAR 13

Dádivas

El poema de amor con que te canto
es, la entrega total del alma mía,
cúmulo de pasión en sinfonía
que alejará de ti todo quebranto.

Enajenas mi ser con ese encanto
que derrocha tu luz de fantasía,
yo, por asir tu risa, regaría
la tierra entera con salino llanto.

Y por verte feliz, mi soberana,
todo diera: mi Sol, Luna y quimera
que pondría a tus pies cada mañana

convirtiendo la ofrenda en placentera
renuncia por amor. De buena gana
yo diera, cien vidas…si las tuviera.

***

Floreció un rosal

Cual mendigo de amor por un camino
que sutil alumbró luna de enero,
inundóse mi ser con tierno esmero
al cambiar su fulgor, mi errar mohíno.

Fue alborada en un mar que cristalino
era espejo mural, fiel compañero
y reflejo tenaz del verdadero
e inefable vagar que fue mi sino.

Hoy pretendo olvidar lo que he sufrido
y expresar el placer de alzar el vuelo
sin narrar el pesar en que he vivido.

Sólo intento saber mirando al cielo
si el hermoso rosal que ha florecido
es de espina y dolor, o terciopelo.

***

EFÍMERO AMOR

Dos cuerpos se unen en angosto abrazo
tremando al aire los ardientes besos,
la pasión prende y nos mantiene presos
ceñidos fuerte con estrecho lazo.

Desde entonces, su playa ha cautivado
la blonda de mis olas al latir,
creando enredadera en mi vivir
la brisa de su mar que me ha embriagado.

Así, con su oleaje me domina,
haciéndome vibrar con insistencia
y transformando mi ser con rara ciencia
que me aturde, enloquece y me fascina.

Mas aquello que a mi alma ha subyugado;
sus palabras de amor bien pronunciadas
y el ardor del placer entre almohadas,
cual cristal, entre escollos se ha quebrado.

***

BIB AZAHAR 12

UN NUEVO AMANECER

Tanto tiempo esperando aquel encuentro
y al llegar, se ensombrece la ilusión,
porque extraño resulta al contemplarlo,
transformando alegría en aflicción.

Transcurren lentamente los minutos,
las horas y los días, y el dolor
que borrara del campo la esperanza,
va cubriendo hoy el cielo de esplendor.

Quedó atrás el impacto que enajena,
se hace fuerte el sentir y, sin razón,
el amor va adentrándose en el pecho
cual daga que atraviesa el corazón.

Ya en el prado renace la esperanza;
sonrisas fertilizan su verdor,
y han brotado caricias y ternura,
regocijo, mil nanas... ¡nuevo albor!

*

NIÑA

Niña, mi pequeña flor.
Mi dulce y más tierno amor,
el aroma de mi vida.
Me inundas con tu fulgor
restañando con candor
del corazón las heridas.

Niña, mi pequeña flor.
Jazmín que inundas de olor
sentimientos y recuerdos.
La imagen que yo venero,
la niña que yo más quiero,
la reina de mis amores.

Niña, mi pequeña flor.
De mi jardín el verdor,
la frescura y la pureza.
Mi bella rosa morena,
tu ternura me enajena,
tus caricias, me fascinan.

Niña, mi pequeña flor,
que transformas con calor
en verano el crudo invierno.
Mi florecilla postrera;
convertiste en primavera
al otoño ya nacido.

¡Niña, mi pequeña flor!

*

HALLAR EN LA POESIA

Llovió tanto en mi camino
que inundose mi destino
con el rezumar del llanto
que provocó mi quebranto
marcando mi triste sino.

Quise tener armonía
y mi vida fue vacía
de paz, amor y pasiones,
sólo me dio revolcones
lo que yo creí ambrosía.

Tal talante me irritaba;
la tristeza me embargaba,
di final al desvarío
y fui cual niño que al río
las penas las arrojaba.

El llanto, se fue secando
y mi sentir sosegando,
cuando hallé con la poesía
la rotunda profecía
de estar... y seguir soñando.

*
Marisa Ferrer

Bib Azahar 11

Un amigo es un tesoro

Un amigo es un tesoro,
alguien lo dijo una vez,
es cierto, lo corroboro
aunque diciendo verdad
apostillo sin desdoro
que como dice el refrán :
“Entre amigos nunca es oro
aquello que luce más”.
Analizo y hago saber
qué es para mí la amistad:
no es el lujo ni el poder,
es darse sin recibir,
es ayudar, es querer,
con franqueza siempre hablar,
nunca odiar y siempre hacer
el bien hacia los demás.
Un amigo tuve yo
que al escribirme poemas
me juraba que él iría
al infierno por la “Nena”
y siempre me ayudaría;
que me ría... permítanme,
su amistad ¿dónde estaría
cuando la necesité?.
Y es que amistad es amar
ya se trate de un mendigo,
y es poner en un altar
y ofrecerse recogido,
es ayudar, es callar,
trabajar o descansar
y, sobre todo es estar
siempre cerca del amigo.

*

Todo es mentira

Si pierdo oportunidad
¡malhaya!, lo pierdo todo,
pierdo prestigio y apoyo
y también autoridad.
Quiero ser estricto y justo
y no perder la razón,
mas si pongo el corazón
la razón, dará disgusto.
¿Cómo hacer para triunfar?,
tal como hacen los villanos
que a todos tienden las manos
y disfrutan el manjar.
Y llegado a conclusión:
no sé mentir ni engañar,
y a fe que para triunfar
hay que saber pelotear
y con aplomo alabar,
con donosura besar,
amistad a todos dar...
y en fin, que para triunfar,
verdad hay que condenar
y a la mentira abrazar,
evitar siempre llorar
y el sentimiento ocultar
y en el fondo, a nadie amar.

*

Se queda en nada

Yo quise a ti mi amigo acariciarte
cual madre que acaricia a su criatura;
mi estima siempre fue tan blanca y pura,
que afloraba verdad al abrazarte.

Mas íntimos que dicen todo darte
te llenan con mentiras de amargura,
pues si auguran en ti la desventura
se alejan de tu ser, sin ayudarte.

Temiendo que aligeres su bolsillo
si mal te va en la vida la jugada,
calcinan su adhesión como un pitillo.

No hay fuerza en su sentir, ni una mirada
que avive tu esperanza con su brillo,
y al fin, ni fue amistad, ni queda nada.

*

AMANTE
Eres mi norte y mi guía.
Compañía en el vivir.
La barca de mi bahía
donde navega el sentir.

Eres paz, amor y guerra;
tempestad y mar en calma;
el abono de mi tierra
e inspiración de mi alma.

Eres calor en mi lecho;
simiente en fértil cosecha;
prendes el fuego en mi pecho;
jamás morirá la mecha.

Para ti mi amado eterno
escribo mis poemarios,
sin temer al duro infierno
de cumplir aniversarios;
pues nuestro amor será eterno
alcanzando centenarios.

***

***

MARÍA
La piel como el terciopelo
y la sonrisa de flor,
los ojos de mar y cielo
y el pelo, noche y dolor.
Soñando estaba María,
soñando, soñando amor,

la Luna le sonreía
burlona, por su candor.
La niña de nieve y fuego
tan pura como el albor,
fue engañada por el juego
de un amante sin pudor.

Su piel ya no es terciopelo
ni su sonrisa de flor,
ni sus ojos mar y cielo
porque los nubla el rencor
y en la noche de su pelo,
tan sólo queda... el dolor.